“Viajando con Arawak desde el sofá”: Granada y Córdoba- Segundo día

Hoy a conocer Granada y la impresionante Fiesta de las Cruces. Comenzaremos, cómo no, con la visita más imprescindible de Granada: “La Alhambra”

Alhambra de Granada

La ciudad palatina nazarí, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984, es, sin duda alguna, el monumento más emblemático de la ciudad. Está formado por un conjunto de antiguos palacios, jardines, convento, iglesia y fortaleza para alojar al Emir y a la corte del Reino Nazarí . Los orígenes de la Alhambra datan del siglo IX, cuando comenzó a utilizarse la Alcazaba como refugio, pero fue en el siglo XIII cuando el primer monarca nazarí, Mohamed I, fijó su residencia real en ella. Está compuesta por varias instalaciones: Alcazaba, Alcázar y Medina. La Alcazaba, o palacio central posee una atípica forma, llamados Palacios Nazaríes, a los que hay que entrar a unas horas determinadas. Las primeras estancias del palacio central son el Mexuar y el Palacio de Comares, dotados de un gran número de habitaciones, una elevada torre y un pórtico que da acceso al Salón del Trono, la mayor dependencia de la Alhambra. Siete imponentes arcos nos reciben descansando sobre columnas decoradas con pasajes grabados del Corán en sus capiteles. En su patio, se encuentran los accesos a los Baños Reales. A continuación, el Palacio de los Leones, también conocido como “harén”, construido por Mohamed V, contiene las estancias privadas de la familia real.

Patio de los Leones

El Palacio de los Arrayanes, con los suelos de mármol blanco del Patio de Comares y el conocido Patio de los Leones, con su famosa fuente de doce leones. También nos encontramos con LaAlcazaba,  el antiguo acceso a la Alhambra. Desde lo alto de ella se pueden ver todas las torres de la Alhambra. Y el Palacio del Generalife, con sus hermosos jardines y su espectáculo de agua. Y los edificios más recientes… el Palacio de Carlos V, con sus museos y exposiciones temporales, la iglesia de Santa María de la Alhambra y el Parador de San Francisco. Qué maravilla, qué forma de disfrutar, tanto del patrimonio como de la naturaleza… y tanto del día como de la noche, cuando la Alhambra tiene un encanto todavía más especial…

Generalife

Terminada esta visita que nos transporta a las “mil y una noches”, regresamos al centro de Granada para comer, ¿qué tal una tortilla de Sacromonte o unas habas con jamón regadas con una cerveza Alhamabra? Y de postre unos piononos, uhmmmmm…

Tras coger fuerzas nos ponemos manos a la obra (mejor dicho, pies a la obra) para conocer Granada a fondo… Sus calles, sus monumentos y por supuesto su fiesta, esa fiesta de la que hablábamos ayer, la fiesta que se celebra normalmente el 3 de mayo, la “Fiesta de las Cruces”. Comenzamos conociendo La Catedral, construida sobre la Mezquita Mayor por orden de Isabel la Católica en 1501, una de las obras cumbres del Renacimiento español. Por diversos problemas, la Catedral quedó solo con una torre y tres cuerpos en lugar de las dos torres y los seis cuerpos previstos. Tiene un total de cincuenta y siete metros de altura. Está dedicada a Santa María de la Encarnación, y en ella destaca la Capilla Mayor, de planta circular y diseñada para servir de panteón para albergar los nichos mortuorios de los Austrias. Los arcos destinados a las tumbas reales pasan a ser ocupados por las pinturas de Alonso Cano sobre la vida de la Virgen. Preciosas son las vidrieras pintadas y las esculturas orantes de los Reyes Católicos de Pedro de Mena, o los bustos de Adan y Eva realizados por Alonso Cano… Y qué decir de la impresionante Capilla Real donde se encuentran, en el centro del crucero, los sepulcros de los Reyes Católicos, obra del artista italiano Domenico Fancelli, y los de Juana y Felipe, del escultor español Bartolomé Ordóñez. En realidad los sepulcros son cenotafios (monumentos) pues los restos mortales de los reyes se encuentran enterrados en la cripta que se encuentra inmediatamente debajo de ellos. La antigua sacristía es ahora el museo catedralicio, que alberga diversas piezas de artes plásticas: pintura, escultura, tapicería, orfebrería y ornamentos sagrados.

Catedral de Granada

Vista La Catedral, continuamos nuestro camino hacia La Alcaicería, antiguo mercado de seda reconstruido y que hoy día alberga comercios dedicados fundamentalmente a la venta de recuerdos, productos tradicionales y artesanales; y la plaza Bib-Rambla, llena de frescor y color gracias a los puestos de flores que la adornan todo el año. Y ahora podemos disfrutar de La Fiesta de las Cruces, ¡la fiesta más colorida de la capital! ¿Desde cuándo se produce esta celebración? En el año 1625 se construyó una Cruz de alabastro en el barrio de San Lázaro y todos los vecinos de la zona lo celebraron cantando y bailando junto a ella. Después, se continuó con la tradición en los barrios más típicos, como el Albayzín y el Realejo, y los niños empezaron a construir pequeños altares decorados con mantones de Manila, cerámica y objetos de cobre. Hoy en día las calles, plazas, patios e incluso escaparates de la ciudad se engalanan y se llenan de altares en honor a la Santa Cruz, celebrándose con música y bailes por toda Granada.

Cruces de Mayo

Y ahora nos subimos hacia El Albaicín, el barrio alto de Granada, para acercarnos a ver ¡el mejor atardecer de Granada!, desde el mirador de San Nicolás donde se juntan tanto visitantes como lugareños, y donde siempre podremos escuchar algo de música además de contemplar unas vistas de la Alhambra que nos dejarán sin aliento.

Mirador de San Nicolás

Y de bajada, damos un paseo por sus laberínticas y preciosas calles con una parada para tomar un té en una de sus muchas y buenísimas teterías o en una de las terrazas y bodeguitas para tomar una buena tapa…

Mañana conoceremos la otra parte de Granada que no solemos visitar pero esta vez sí :). ¡¡No te la pierdas!!

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